Pues si…habéis leído bien: Branding experiencial, muchos discutiréis el factor experiencial de la propuesta que os traigo pero, si lo pensáis, muchos de los factores e indicadores que hacen cambiar al logo son controlados por los propios usuarios como por ejemplo su nivel de felicidad.
Y es que el equivalente al Instituto Nacional de Estadística de España en Ecuador quería que su nuevo posicionamiento fuera mas cercano a la realidad del país y que los propios ciudadanos decidieran cómo debería ser su identidad corporativa. Para ello confiaron en los chicos de Maruri Grey que hicieron un trabajo excepcional y estrechamente vinculado a la marcha del país.

Así, el logo se componía de 5 círculos concéntricos cada uno de los cuales refería a un indicador importante para la marcha del país: felicidad de los ciudadanos, empleo, acceso a vivienda, educación y acceso a agua potable. Cubriendo los 5 principales problemas que los ciudadanos del país preocupan hoy en día. Así, el logo se modificaba constantemente influenciado por la realidad del país, algo que tuvo especial trascendencia durante el terremoto que asoló la región hace pocas semanas.
Como veréis el logo comenzó a variar de manera sustancial en este desastre e hizo que muchos se dieran cuenta de cómo una catástrofe de estas características no solo afectaba al estado de ánimo del país sino que el propio logo se hacía eco inmediato del sentir de la población.
La verdad es que me ha parecido muy potente la vinculación que han creado entre un organismo gubernamental que, por definición, suele pasar inadvertido, y la realidad de cada uno de los ciudadanos que se ven representados por esta institución (ya sea por su dato estadístico o por la participación en las plataformas de recepción de datos como el móvil en el indicador de felicidad).
De una u otra manera se demuestra que el branding puede ser mas dinámico y vivo de lo que habitualmente vemos y que la mejor manera de vincular una marca con sus usuarios es hacerlos partícipes directos de su evolución.
lo vi en Advertolog.